La seda artificial ha recorrido un largo camino desde la concepción del rayón a principios del siglo XX, y en la actualidad, la seda real y la falsa puede ser muy difícil de distinguir para una persona inexperta.
Pasos
Paso 1. Realice una prueba táctil
Esta es una prueba rápida que se puede hacer especialmente antes de comprar cualquier cosa hecha de seda. La idea es frotar la seda con las manos. Si sientes calor al frotarlo, es real. Con seda artificial o sintética, es imposible sentir calor al frotar.
Paso 2. Realice una prueba de anillo de bodas
Si la seda que planeas comprar no es muy pesada, ¡esta prueba es perfecta! La seda genuina de la capa inferior se puede enhebrar y pasar fácilmente a través de un anillo de bodas porque la seda es naturalmente flexible y suave. Por otro lado, las sedas artificiales se arrugarían y sería imposible pasarlas.
Paso 3. Considere el precio
Por supuesto, la seda genuina siempre es significativamente más costosa que las sintéticas. A veces, la seda sintética tiene un precio mucho más alto y parece seda para un ojo inexperto, pero el precio bajo en su mayoría es una muy buena indicación de que es falsa.
Paso 4. Examine el brillo del material
La seda es especialmente conocida por su brillo. El brillo suele deberse a la combinación de hilos que le da un brillo particular al material. El color de la superficie parece cambiar a medida que cambia el ángulo de la luz. Las sedas artificiales, sin embargo, dan un brillo blanco sin importar el ángulo de luz que incida sobre ellas.]
Paso 5. Mira el tejido
La seda tejida a mano se jacta de ser única. Hay variaciones menores en la uniformidad de la textura que son bastante notables. Las sedas tejidas a máquina se ven perfectas.
Paso 6. Vea si puede realizar una prueba de quemado
Esta es quizás la mejor y más definitiva prueba para encontrar seda genuina. Puede tomar algunos hilos del material y quemarlo con una llama. Quemaduras de seda genuina con olor a cabello quemado. Cuando quema el borde de la tela de seda real, la llama es invisible y dejará de arder tan pronto como se retire. La ceniza que se produce es negra, crujiente y quebradiza. Se convierte en polvo cuando se retuerce en los dedos, con la seda artificial es todo lo contrario. Cuando se quema la seda sintética, hay una llama y un olor a plástico. No se producen cenizas. No hace falta decir que es posible que deba tener cuidado con este paso, debido a su naturaleza inherentemente peligrosa.
Paso 7. Si realmente necesita saberlo, considere una prueba química
La seda real se disuelve en lejía, mientras que la seda falsa no.