La pizarra es una piedra que aporta belleza natural al hogar y puede ser costosa de instalar. La limpieza de mantenimiento regular puede ayudar a preservar la pizarra. Pero a veces, necesita una limpieza profunda o una eliminación de manchas. Una combinación de limpieza regular y una limpieza profunda ocasional puede ayudar a mantener su pizarra en buenas condiciones.
Pasos
Método 1 de 3: mantener una rutina de limpieza regular
Paso 1. Barra o elimine el polvo y la suciedad con regularidad
Si tiene suelos de pizarra, es importante barrer a diario o varias veces a la semana. El polvo puede dañar la pizarra con el tiempo al desgastar la superficie. Mantener un programa de limpieza regular puede prevenir este daño.
Use una escoba seca o un paño para este paso
Paso 2. Mezcle una solución de agua y jabón suave
Para ello, necesitará un balde grande lleno de agua tibia. Agrega un poco de jabón.
El jabón para platos funciona bien para esto
Paso 3. Trapee o limpie la superficie
Limpia suavemente la superficie de la pizarra con pequeños movimientos circulares. Este movimiento aflojará y levantará el polvo y la suciedad secos.
- Use un trapeador suave, hecho de materiales como una microfibra. Las cerdas rígidas pueden dañar la piedra.
- Para superficies verticales, limpiar de abajo hacia arriba.
- La pizarra debe limpiarse con jabón cada 2-3 meses.
Paso 4. Enjuague la pizarra con agua
Primero enjuaga el balde y el trapeador y luego úsalos para enjuagar la pizarra con agua. La acumulación de jabón puede atraer más suciedad, lo que significa que tendrás que limpiar tu pizarra nuevamente.
Paso 5. Seque la pizarra con un paño suave, seco y fresco
Esto eliminará las rayas que se formen en la pizarra que puedan ocurrir por el secado al aire y evitará que se resbale en las superficies del piso.
Método 2 de 3: limpieza profunda
Paso 1. Barra y trapee la pizarra
Empiece por eliminar el polvo seco y los escombros barriendo. Luego trapee o limpie la superficie de la pizarra con un paño suave o un trapeador de microfibra en agua jabonosa. Deje que la superficie se seque.
Paso 2. Aplique aceite de teca a la pizarra
Una vez que la superficie esté completamente seca, aplique aceite de teca a un paño limpio y seco. Con pequeños movimientos circulares, aplique un paño sobre la pizarra para cubrirla con una fina capa de aceite de teca.
El aceite de pizarra designado también está disponible para comprar en algunas ferreterías. Sin embargo, tiende a ser más caro. El aceite de teca logrará los mismos resultados
Paso 3. Limpiar la lechada entre las baldosas de pizarra
Mezcle una solución en una botella rociadora que contenga 50% de peróxido de hidrógeno y 50% de agua. Puede encontrar peróxido de hidrógeno en ferreterías o farmacias. Rocíe la solución sobre la lechada.
- Evite el contacto directo con los ojos cuando use peróxido de hidrógeno.
- Repita este paso según sea necesario si la lechada no se ve limpia después de la primera ronda.
Paso 4. Vuelva a aplicar el sellador según sea necesario
El sellador protege la pizarra del desgaste diario y se usa en superficies interiores. Cada sellador es diferente, así que asegúrese de seguir las instrucciones específicas que lo acompañan.
- En general, aplique al menos dos capas y deje que el sellador se seque completamente entre capas.
- Cada sellador vendrá con instrucciones sobre la frecuencia con la que se debe volver a aplicar.
Método 3 de 3: quitar una mancha
Paso 1. Mezcle una solución en una botella rociadora que contenga 50% de peróxido de hidrógeno y 50% de agua
Deje reposar la mezcla durante unos 10 minutos.
Paso 2. Rocíe la solución sobre la mancha y frote
Con un cepillo de cerdas suaves o un paño de microfibra, frote la mancha con pequeños movimientos circulares. Si la mancha no desaparece, es posible que se necesite una solución más fuerte.
Paso 3. Mezcle una solución de peróxido de hidrógeno y bicarbonato de sodio
Agregue unas cucharadas de bicarbonato de sodio al peróxido hasta que la mezcla se vuelva burbujeante. Espere hasta que las burbujas se detengan.
Paso 4. Aplicar la solución a la mancha
Una vez que la mezcla de peróxido y bicarbonato de sodio se haya endurecido, puedes limpiarla con un paño limpio.
Consejos
Para las superficies exteriores, puede ser poco práctico e innecesario limpiar con jabón o quitamanchas. En cambio, es suficiente barrer regularmente para mantener estas superficies libres de escombros y enjuagar con agua cuando la acumulación de suciedad sea visible
Advertencias
- La pizarra puede volverse resbaladiza cuando está mojada. Tenga cuidado y muévase lentamente al limpiar una superficie de pizarra, especialmente una superficie de techo, si está parado sobre ella.
- No use una lavadora a presión para limpiar las superficies exteriores de pizarra, especialmente las superficies del techo.