La lechada es una característica necesaria de la mayoría de los baños porque ayuda a mantener las baldosas adheridas a las paredes en condiciones de alta humedad. Desafortunadamente, debido a la humedad, la lechada también es susceptible al crecimiento de moho. El moho no solo es una molestia antiestética, sino que también puede ser peligroso para su salud si lo inhala o se expone a él. Afortunadamente, si toma las precauciones de seguridad adecuadas, puede usar ingredientes domésticos comunes para limpiar el moho de la lechada y prevenir el crecimiento de moho en el futuro.
Pasos
Método 1 de 4: Adopción de las precauciones de seguridad adecuadas
Paso 1. Consiga un respirador N-95
La inhalación de esporas de moho no es saludable para el sistema respiratorio. Por esta razón, es importante que obtenga un respirador o una mascarilla que pueda filtrar las esporas. Puede comprar un respirador N-95 en la mayoría de las ferreterías o en línea.
Paso 2. Tome un par de anteojos cuando limpie el moho
Usar un par de gafas gruesas evitará que las esporas de moho entren en sus ojos. Úselos cuando limpie el moho en su lechada y no se toque los ojos, la boca o la nariz mientras limpia. Después, asegúrese de ducharse y lavarse las manos.
Paso 3. Use guantes de goma largos
No toque el moho con las manos desnudas. En su lugar, compre un par de guantes de caucho natural, neopreno, nitrilo, poliuretano o PVC que le lleguen hasta el codo. Esto mantendrá sus manos a salvo del moho y los productos químicos mientras limpia.
Paso 4. Selle las salidas de aire y los conductos de calefacción con plástico
Selle las rejillas de ventilación colocando una hoja de plástico de poliuretano sobre ellas y sellando los lados con cinta adhesiva. Cuando limpie el moho, las esporas a menudo irán al aire y pueden atascarse en los conductos de calefacción o las rejillas de ventilación. Sellarlos mientras limpias evitará que el moho se propague a otras partes de tu casa.
Paso 5. Abra una ventana y apunte un ventilador al exterior
Para evitar que el moho se propague a otras partes de su casa, asegúrese de que la habitación que está limpiando esté bien ventilada. Un ventilador puede empujar las esporas de moho al exterior, en lugar de esparcirlas por la casa.
Método 2 de 4: lavar la lechada con vinagre
Paso 1. Llene una botella de spray con partes iguales de agua y vinagre blanco
Combine el vinagre blanco destilado y el agua en una botella con atomizador, en porciones iguales. Agite la botella para mezclar los líquidos.
Evite el uso de otros limpiadores ácidos para lavar su lechada porque podría dañar su azulejo
Paso 2. Rocíe la lechada mohosa
Comience desde la parte superior de la lechada y rocíe la solución sobre la lechada. Concentre más solución de vinagre y agua en las áreas con moho visible en la lechada o en las áreas donde pueda sospechar el crecimiento de moho.
Paso 3. Limpie la lechada con un cepillo para lechada o un cepillo para fregar
Trabaje un cepillo rígido con un movimiento circular sobre el molde visible. A medida que raspa la lechada, el moho debería comenzar a desaparecer. Si tiene problemas para entrar en las grietas, puede usar un cepillo de dientes.
Paso 4. Enjuague y seque la lechada
Enjuague toda la solución de vinagre y agua con agua de su cabezal de ducha. Use una toalla de algodón seca para absorber la humedad sobrante del enjuague.
Enjuaga el cepillo que usaste para eliminar las esporas de moho sobrantes en sus cerdas
Método 3 de 4: limpieza con lejía y bicarbonato de sodio
Paso 1. Mezcle bicarbonato de sodio y lejía hasta formar una pasta
Combina 3/4 de taza (96 g) de bicarbonato de sodio y 1/4 de taza (59,14 ml) de lejía en un tazón. A medida que mezcle los dos ingredientes, debería comenzar a convertirse en una solución pegajosa similar a la pasta de dientes.
Puede usar peróxido de hidrógeno en lugar de lejía si lo prefiere
Paso 2. Aplique la pasta a la lechada con un pincel
Use un pincel para untar una gran parte de la pasta en su lechada. La lejía destruirá las cerdas de tu cepillo, así que usa uno que no te importe tirar.
Si no tiene un pincel, puede usar un cepillo de dientes viejo
Paso 3. Cubra la lechada con una envoltura de plástico y déjela reposar
Coloque láminas de plástico para envolver sobre la pasta y asegúrelas en su lugar con trozos de cinta adhesiva. Deje que la pasta se asiente sobre la lechada durante al menos 10 minutos. Durante este tiempo, la solución debería comenzar a blanquear la lechada.
Paso 4. Use una esponja húmeda para enjuagar la pasta
Retire la cinta de los bordes de la envoltura de plástico y deséchela en la papelera. Sature una esponja con agua y úsela para limpiar la pasta. Es posible que tenga que restregar un poco si la pasta se ha secado.
Paso 5. Seque la lechada con una toalla o paño de microfibra
Seque completamente la lechada y el área del baño con un paño seco de algodón o microfibra. Cuanto más seca esté la ducha después de limpiarla, es menos probable que crezca moho en el futuro.
Recuerde enjuagar el cepillo y la esponja que utilizó para limpiar la lechada
Método 4 de 4: Prevención del moho en el futuro
Paso 1. Detenga la causa del moho
El moho generalmente se crea cuando hay una fuga en el cabezal de la ducha que puede causar humedad continua en la bañera. Localice dónde está creciendo el moho y arregle la fuente de humedad para evitar que suceda en el futuro.
Paso 2. Limpie y seque la lechada después de usar la ducha o la bañera
Limpiar la ducha después de usarla absorberá la humedad que fomenta el crecimiento de moho. Cuanto más diligente sea para mantener el área seca, menos posibilidades de que se forme moho.
Paso 3. Vuelva a sellar su lechada
Si tiene lechada a base de cemento, volver a sellarla cada 3 a 5 años puede ayudar a cerrar los poros en la lechada y prevenir el crecimiento de moho en el futuro. Aplique el sellador para limpiar la lechada y limpie cualquier exceso que se derrame sobre las baldosas. Deje que la lechada se seque durante al menos 3 horas antes de usar la ducha o el baño nuevamente.
No selle epoxi, uretano ni otros tipos de lechada sintética
Paso 4. Mantenga su baño bien ventilado
Siempre que tome una ducha o un baño, asegúrese de encender el ventilador del baño y abrir una ventana para reducir la cantidad de humedad en su baño. Tener un baño lleno de vapor acelera el crecimiento bacteriano y producirá más moho.